Artículo escrito por @Tiago Ferreira da Cruz, Director de Training en MRC International people training.

Hoy en día es habitual oírse que las empresas están cambiando el enfoque hacia sus personas y la realidad es esa, el Mundo empresarial ha cambiado y la imagen del líder también.

Ya no sirve un buen currículo o un MBA si no va acompañado de experiencia con personas, es decir, a día de hoy el principal enfoque de un buen líder tiene que ser sus personas y que ellas valoren el ambiente del trabajo en el que viven.

Nos hemos acostumbrado a un tipo de liderazgo basado en comportamientos estrictos y en resultados, obviamente que estos comportamientos son muy importantes, pero también es verdad que todo se hace mediante relaciones, ya que somos seres humanos.

Debemos conocer la fórmula mágica del R1*R2=R3, de una manera general todas las empresas tienen la R1 (recursos) y la R3 (resultados) pero la gran diferencia está en la R2 (relaciones) que tienen un efecto multiplicativo. Las empresas que lo consiguen tener van más rápidas y de una manera más efectiva.

¿Y cuál la razón para que se hable tanto de estos cambios de la sociedad y la nueva visión que necesita tener un líder hoy en día?

Las personas están cambiando su paradigma de vida y valoran mucho más el presente que el futuro:
Con la pandemia, nos hemos dado cuenta de que nada está garantizado y que de un día al otro la realidad que conocemos puede cambiar, ya sea quedarnos en casa sin poder salir, perder un familiar querido, tener aforo para ir al supermercado o comprar los bienes básicos. Nos ha sonado la alarma de que lo más importante es uno mismo y que necesitamos invertir bien nuestro tiempo.

Estar contentos en nuestros trabajos, poder tener tiempo para nuestras familias y tener tiempo para nosotros. Eso es, nos hemos vuelto un poco más egoístas y si reflexionamos un poco, nos damos cuenta de que esta actitud es positiva, puesto que hace con que busquemos la felicidad, si estamos más contentos todo al nuestro rededor funciona mejor y lo vemos de una manera más positiva. Importante referir que visiones positivas generan comportamientos positivos, tenemos que visualizar lo que nos hace felices.

El papel del Líder es estar atento a estos cambios y entender por qué razón las personas quieren tener el modelo hibrido en su trabajo, quieren estar más tiempo con sus hijos y trabajar en sitios donde sus líderes tengan desarrolladas las habilidades de empatía para liderar con el buen ejemplo.

Existen sectores donde estos cambios estructurales del trabajo son más complicados, pero el líder debe asegurar que su conduta humana y el trato del equipo son la prioridad.
Además, debería resultarnos fácil entender que si tenemos a nuestras personas contentas e ilusionadas en su trabajo, todos ganamos con eso, sea en el buen ambiente que se vive en nuestras empresas, pero también con la motivación con que los equipos trabajan para llegar a los objetivos.
Este cambio ya se está haciendo en todas las tipologías de empresa, sea en las Multinacionales, Startups o Pymes. Lo importante es conseguir que nuestras personas estén motivadas y sea posible llegar a los resultados, ya que son estas personas las que lo hacen posible.

La sociedad evoluciona y todos debemos estar preparados para estos cambios. Muchas de las veces estos cambios nos generan miedos, incertidumbres, riesgo, pero el primer paso es ser consciente de que necesito cambiar y trabajar mis habilidades humanas.
Os animo a invertir en la formación de habilidades humanas para vuestros equipos, a través de trainings direccionados a las necesidades de cada sector y objetivos de vuestros equipos.